Las celebraciones navideñas cada vez están más cerca y numerosas familias comienzan la búsqueda de adornos para llenar de luz y alegría sus hogares. No obstante, en el Pueblo Mágico de Chignahuapan, la Navidad nunca concluye.
Y es que esta comunidad del estado de Puebla, se dedica a la producción de millones de esferas para los árboles de Navidad. Cuenta con muchos talleres, la mayoría familiares, y es la industria principal del sitio.
De modo que, en cada puesto de Chignahuapan, puede hallarse algún trabajo hecho a mano, relacionado con las celebraciones decembrinas, así como también sombreros, licores, dulces típicos, quesos y pulque.
Si se visita la Plaza de la Constitución de Chignahuapan se hallará un quiosco de estilo mudéjar, muy colorido. Cerca de ese jardín se levanta la Parroquia de Santiago Apóstol, construida en el siglo XVI.
A solo unas calles de allí, entre pintorescas viviendas de madera y negocios en donde se venden adornos de Navidad, se ubica la Basílica de la Inmaculada Concepción. En este edificio sacro se atesora la escultura de la Virgen de mayor tamaño en Latinoamérica.
Por si fuera poco, este Pueblo Mágico ofrece varias alternativas para el ecoturismo, como la pesca en la cercana Laguna Almoloya, en la cual se pueden gozar paseos en lancha y ricas experiencias gastronómicas en los restaurantes que rodean el sitio.