No cabe duda que la comunidad más atractiva de la región del bajío hidalguense es Huichapan, un Pueblo Mágico incomparable repleto de colores y detalles pintorescos. Es una de las escalas obligadas para todos los viajeros interesados en explorar el Camino Real de Tierra Adentro. Esta comunidad vio nacer a próceres como Julián Villagrán, una importante figura en el crisol de la Independencia de México. Cabe destacar que los avatares históricos de Huichapan están expuestos en sus tesoros arquitectónicos religiosos y civiles que hoy por hoy cautivan a los visitantes tanto nacionales como extranjeros.
Cuando estén de visita por estos rumbos del estado de Hidalgo, les sugerimos visitar la Capilla de la Tercera Orden, misma que cuenta con dos portadas de estilo churrigueresco, siendo especialmente bella la que homenajea a San Francisco. No menos interesante es la Capilla de la Virgen de Guadalupe, con su fachada de rosada cantera. Otro destacado edificio sacro de Huichapan es la Parroquia de San Mateo, en especial por su vistoso y ornamentado portón.
Dos lugares también imperdibles en el entorno de Huichapan, Pueblo Mágico, son el Museo de Arqueología e Historia, valioso recinto que nos permite conocer los antecedentes precolombinos y virreinales del lugar, y la Presidencia Municipal, una de las construcciones más emblemáticas de esta histórica comunidad.
Para fines gastronómicos al estar de paseo por Huichapan, les recomendamos saborear antojitos como la barbacoa y las carnitas. Se trata de los platillos más tradicionales del lugar y por ello se sirven en los restaurantes y fondas más conocidos de la zona. Imposible no sugerirles adquirir artesanías de bella manufactura en distintos comercios de Huichapan, en especial objetos elaborados con cantera y pequeñas esculturas de admirable estampa.
No obstante, también los aficionados a la aventura y el contacto directo con la naturaleza tienen mucho para disfrutar en este formidable Pueblo Mágico hidalguense. En este sentido, les aconsejamos conocer Bioparque El Saucillo, mismo que cuenta con los restos de un acueducto construido en el siglo XVIII. En este parque de profusa vegetación se puede practicar el senderismo, el ciclismo de montaña y los saltos en tirolesa, entre varias otras actividades recreativas.